¿Estamos ganando la lucha contra el ransomware?

El ransomware se convirtió en la principal arma de los ciberdelincuentes en 2020. Desde entonces, ocupó un lugar destacado en la agenda de seguridad mundial, afectando a empresas, servicios públicos y particulares por igual. Las organizaciones han tenido que reorientar rápidamente sus estrategias de ciberseguridad, protección de datos y recuperación ante desastres para adaptarse a esta nueva pandemia. Pero ¿está cambiando la situación? Tres años después, el ransomware y la cibernética siguen siendo la prioridad número uno para la mayoría de los equipos de seguridad, y los interminables titulares de víctimas de ransomware de alto perfil siguen apareciendo. ¿Se acerca el final? ¿Qué cambió desde el 2020 y qué queda por hacer para cerrar definitivamente el círculo del ransomware?